Generalmente no hablo de política en mi blog, pero esta vez prendo velas al recuerdo de lo que pasó hace 10 años en Lima, en la residencia del embajador de Japón. La historia la sabemos la mayoría de peruanos, que vimos por TV el momento en que los comandos del ejército entraban en la residencia a rescatar a 72 ó 73 rehenes que estaban a manos de terroristas del MRTA. El rescate fue brillante y sólo falleció un rehén, un vocal de la corte suprema apellidado Giusti quien, oh coincidencia, al parecer sabía de cojudez y media sobre el asesor presidencial Vladimiro Montesinos. Habiendo decidido arriesgar su vida por la de otros, los héroes de la operación Chavin de Huantar perdieron a dos valientes soldados. Todos nos acordamos de eso. Lo que no nos acordamos fue la forma en que la prensa difundió la situación. El Diario La República mostraba un desconcertante apoyo a los terroristas, y es increíble que ahora, a los 10 años y con otros propietarios, el mismo diario llame "héroes" a los que enfrentaros a los delincuentes.
Esos mismos comandos por poco tuvieron que cancelar la operación por culpa de una infidencia del mismo diario, el cual publicó unas fotos en donde se veían camiones que retiraban tierra y desmonte de casas aledañas a la residencia, dando a entender que túneles se venían excavando. Fue una infidencia terrible puesto que los terroristas en ese momento ya contaban con teléfonos celulares proveídos, supuestamente, por un enamoradizo miembro de la Cruz Roja quien quería que su adolescente terruquita salga viva de ésa. Si los terroristas se enteraron o no de los túneles aún está en duda, pero se sabe que el líder, Néstor Cerpa, había anunciado que las visitas médicas a los rehenes iban a terminar el lunes 21 de Abril. El Martes 22 a las 3:22 de la tarde, el operativo tuvo lugar. Los terroristas esperaban un ataque nocturno, por eso estaban jugando fulbito y de cuando en cuando rastrillando sus armas a los rehenes, quienes ya se habían enterado del operativo por medio de señas externas, micrófonos y demás trucos de espionaje al mejor estilo James Bond.
Ahora, nadie se acuerda de que fueron Fujimori y Montesinos, dos simples gángsters, los responsables de rescatar a los rehenes y, pese a quien le pese, es a Fujimori a quien se le tiene que agradecer que los terroristas hayan sido pajareados de manera tan brillante. Fujimori, capaz de cojudear a un zorro, les puso negociadores, garantes, un cura, Fidel Castro, y literalmente los agotó. Fué fácil para los comandos entrar y aniquilar a los terroristas mientras jugaban fulbito y los rehenes ya se preparaban para la aventura de su vida, quizás la última.
10 años después de la crisis y el rescate, el Perú es un país en donde la injusticia sigue reinando, aunque parece que con menos poder que antes. Mucha agua ha corrido por debajo del puente, pero por favor, no olvidemos cómo se pusieron las cosas con el gobierno Fujimorista después del rescate y cómo Montesinos corrompió a todos, hasta a los incorrompibles.
10 años después de la crisis y el rescate, el Perú es un país en donde la injusticia sigue reinando, aunque parece que con menos poder que antes. Mucha agua ha corrido por debajo del puente, pero por favor, no olvidemos cómo se pusieron las cosas con el gobierno Fujimorista después del rescate y cómo Montesinos corrompió a todos, hasta a los incorrompibles.
He puesto en Youtube el documental que la televisión oficialista del gobierno de Fujimori mostró en el segundo aniversario de la operación. Puede notarse la excesiva sobonería de los productores y el control total de los textos por Montesinos. Disfrútenlo (o mejor dicho, admírense de cómo estaban las cosas con el Chino:)
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